sábado

Sexto día: Pedrouzo - Santiago de Compostela

Sexto Dia
11/7/2009
Son las 6.30 de la mañana. Hoy si nada sucede llegaremos a Santiago de Compostela. Durante la noche en la penumbra con los ojos abiertos clavados en el techo del pabellón pensaba en las experiencias vividas y por donde empezaría si lo tuviese que contar y no lo sé. Tenía razón aquel peregrino que decía que cada uno vive el mismo Camino de diferente forma, dependiendo de su momento vital, de lo que espera, de lo que se encuentra y de lo que interpreta.
Yo personalmente creo haber vivido el Camino y con el Camino. Aprender a interpretar sus señales, no las orientativas sino aquellos mensajes que funcionan como alertas. A medida que pasaban las días eras capaz de preveer lo que te quedaba por delante, guiarte sin mapas y no temer los obstáculos. A equivocarte, a volver a equivocarte y a no temer los errores. A tomar los caramelos de uno en uno y a guardar siempre uno. A confiar siempre en que el Camino cuando lo más lo necesites te regalará un caramelo. A que la Suerte es Suerte, pero también un cúmulo de circunstancias que se asocián gracias a pequeñas decisiones acertadas. A echar mano en los momentos difíciles de aquellas cosas que te dan vida y te estimulan. A que la armonía en el tandem o en el grupo nos engrandece y multiplica nuestras fuerzas.
Desayunamos tranquilamente en O Pino, en la Cafetería-Pastelería O Che. Unos enormes platos de pasteles y sólo te cobran los cafés. Un sitio muy recomendable aunque tengas que ir a propósito.
El día estaba cubierto por un manto denso de niebla, que te humedecía como si fuese lluvia. Yo llevaba la rueda pinchada y cada poco paraba para darle aire, pretendía llegar así a Santiago. Me hubiese gustado no haber pinchado el día anterior, para poder alabar plenamente el rendimiento de una bicicleta que en poco supero los 200 euros y que aguanto la dureza del camino con gran fortaleza, sin grandes desajustes. Increible.
Este tramo del Camino era una procesión de interminable de Peregrinos que con ilusión todos te saludaban con un vigoroso "Buen Camino". Después de alguna leve subida llegamos al Monte do Gozo, estuvimos un buen rato esperando a que la niebla se disipase y nos permitiese ver las torres de la Catedral, no fue posible. Felices y repasando mentalmente las experiencias del Camino avanzamos hacia Santiago. Cuando llegamos hacía un sol espléndido y había un ambiente muy animado. En la Plaza de Obradoiro estaban con los preparativos para el concieto de Lou Reed. Descansamos tumbados en el suelo contemplando la Catedral con gran satisfacción. Después de un intento fallido de conseguir la Compostelana acudimos a la Misa del Peregrino. Momento de emociones. Durante 30 min. van citando los grupos llegados desde esa mañana y su origen. Ahí te das cuenta de la Universalidad del Camino, del enorme intercambio cultural que fluye y la enorme oportunidad que para Galicia representa... Durante la ceremonia participan diversas hermandades y finaliza con el Botafumeiro. Momento de grandes abrazos y de una satisfación y felicitación común.De ahí fuimos a obtener la Compostelana y a reunirnos con nuestra familia... Es un momento de alegría por ver a aquellos que son el motor de tu vida y de algo de nostalgia por alejarte del lugar donde te reencontraste contigo mismo.... Continuará

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Sodes uns fenomenos.
    As fotos e o Blog están moi ben, pero as caidas moito mellor, son para rirse un pouco, porque non tivestes golpes fortes, jejeje.

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